La presbicia, también conocida como vista cansada, es la pérdida de capacidad para poder ver de cerca.
Es frecuente a partir de los 40 años. La palabra griega presbicia significa, literalmente, «ojo viejo».
Conozcamos más de ésta patología relacionada con la edad.
Causas de la presbicia o vista cansada
Básicamente, la causa es el proceso de envejecimiento, directamente relacionado con el estado del cristalino.
El cristalino es una membrana transparente y flexible que su función principal es hacer de lente, enfocar.
A partir de los 35-40 años, tanto hombres como mujeres, empiezan a tener alteraciones en la flexibilidad del cristalino, lo que se traduce en dificultad para enfocar, concretamente de cerca.
A destacar que la presbicia no es una enfermedad. Es un proceso natural, dentro muchos otros, que tienen que ver con el envejecimiento.
Síntomas de vista cansada
Son diversos los síntomas que la vista cansada o presbicia nos pueden producir. Tenemos los siguientes ejemplos:
- Dificultad para leer de cerca.
- Molestias en los ojos al trabajar delante del ordenador.
- Problemas también para enfocar de lejos de forma rápida.
- Dolores de cabeza, sobretodo por la noche.
- Fatiga visual y picor en los ojos.
Si usted nota alguno de estos síntomas, acuda a una oftalmólogo para poder actuar lo antes posible.
Presbicia y cataratas
La presbicia y las cataratas tienen un factor en común: las dos son afectaciones del cristalino.
Si la presbicia afecta a la flexibilidad del cristalino a partir de los 40 años, la catarata afecta a la transparencia del mismo.
Estadísticamente, a partir de los 70 años de edad, el cristalino se vuelve opaco, creando «la catarata».
Tanto la presbicia como la catarata, la solución definitiva es la operación. Aunque la presbicia con ajuste de gafas se puede compensar facilmente.
Las dos alteraciones del cristalino están relacionadas con el envejecimiento, por tanto no hay forma de evitarlas. En cambio, si se pueden ralentizar su aparición con una buena alimentación, ejercicios de enfoque y descanso de la vista.
El cuidado de la vista en la tercera edad
El cuidado de la vista es crucial en cualquier edad, pero más significativa es en la vejez. Puede ser la clave para tener una buena calidad de vida.
Con el envejecimiento nos aparecen multitud de alteraciones visuales, como la presbicia, las cataratas o al sequedad en los ojos, que nos afectan en nuestras actividades de la vida diaria y en nuestra actitud vital.
Tal y cómo comentábamos en una artículo de nuestro mismo blog, la lectura en la tercera edad es una de las mejores actividades para el anciano.
Los múltiples efectos de la lectura están demostrados científicamente, y por eso en la residencia Allegra apostamos por ella.
Tener un buen cuidado de la vista nos permitirá mantener al máximo nuestras actividades tanto lúdicas como funcionales.
Se puede convivir con la presbicia y se puede eliminar con una operación quirúrgica, no permitamos que nos limite nuestra capacidad de disfrutar de nuestro entorno.