La demencia senil es un síndrome, tal y como la define la Organización Mundial de la Salud (OMS), que implica un deterioro tanto cognitivo como físico y funcional.
Se puede considerar un síndrome crónico o evolutivo que conlleva una pérdida de capacidades de forma progresiva. No tiene que ir ligado con el envejecimiento. O sea, no por envejecer vamos a padecer una demencia.
Como proceso evolutivo, los expertos definen varias fases de la demencia. En este artículo hablaremos de dichas fases, sus síntomas y la manera de poder tratarlos.
Las 7 fases de la demencia senil
Como proceso evolutivo, la demencia se caracteriza por diversas fases de evolución.
No existe un tiempo definido concreto para pasar de una fase a otra, debido a que son muchos los factores que influyen en la evolución de la enfermedad, como por ejemplo el estado de salud, la soledad, el nivel socio económico, etc.
Veamos pues cuales son les fases que por las que evoluciona una persona que sufre una demencia.
Ausencia de deterioro cognitivo
Ésta es la primera fase, y la mayoría de las personas mayores se encuentran en ella: la fase inicial dónde no hay signos evidentes de demencia.
De hecho, esta fase se podría juntar con la próxima, pues no tienen signos de deterioro cognitivo relacionado con afectación del cerebro. O sea, pérdida de memoria clara.
Déficit de memoria asociados a la edad
Las alteraciones motrices son síntomas también de la demencia
Son déficits asociados a la edad, propios del envejecimiento orgánico.
Puntuales, específicamente de nombres de lugares o personas, y relacionados con la memoria reciente. Nada atribuibles a un proceso patológico de demencia.
Ahora bien, es una fase que requiere de una buena observación y, sobre todo, de realizar una buena prevención, con una alta gama de estímulos diferentes para el anciano.
Deterioro cognitivo leve
Las personas mayores que se encuentran en esta fase presentan signos notables de deterioro de la memoria y de las actividades de la vida diaria. Aparecen desorientaciones leves, olvidos frecuentes, etc.
Estos déficits son más marcados que por la edad tocaría. Son personas que les cuesta orientarse, retener información y mantener la atención.
No podemos hablar propiamente de demencia, pero sí que podemos afirmar que en esta fase hay un tanto por ciento muy elevado de padecerla.
Demencia leve o temprana
Estamos ante el inicio de la demencia senil como tal.
Aquí ya existen problemas graves, tanto de memoria como de funcionalidad, que provocan cambios sustantivos en la manera de ser de la persona anciana.
Si bien es posible que al inicio de ésta etapa, la persona reconozca que algo le pasa, con el tiempo y a raíz de un mecanismos de defensa, empiezan a negar al evidencia.
Aun que, cómo apuntábamos anteriormente, es difícil determinar un tiempo de evolución de las diferentes fases, la mayoría de los expertos mundiales están de acuerdo en afirmar que la cuarta fase suele durar unos dos años, aproximadamente.
Demencia moderada
Podríamos llamar a ésta fase, cómo la fase intermedia.
Una fase done el anciano empieza a necesitar la ayuda de terceras personas, sobretodo en lo referente a las actividades de la vida diaria instrumentales, como llamar por teléfono, usar el dinero, etc.
Demencia moderadamente severa
La demencia sigue avanzando, y con ella aumenta la dependencia de la persona mayor.
Nos encontramos con situaciones en las que la persona precisa de una ayuda constante. Requiere atención de uno o más cuidadores, durante todo el día.
Además de las dificultades en la cognición y en la funcionalidad, aparecen cuadros de agitación y de trastornos de conducta, alteraciones en la deambulación, delirios.
Demencia severa o avanzada
Entramos en la última fase. En ella la persona anciana ha perdido las praxias motoras, las habilidades psicomotrices, la atención, etc.
La persona suele estar encamada, precisa de ayuda en todos los aspectos de su vida, y necesita una atención constante para orientarla en el espacio y el tiempo.
Los expertos determinan que ésta fase tiene una duración aproximada de dos años y medio.
Las fases de la demencia afectan a la persona y su familia
Síntomas de la demencia senil
Nos centraremos en las tres últimas fases del proceso evolutivo demente.
Básicamente, las hemos enumerado en el anterior capítulo y ahora haremos una recopilación según las diferentes fases.
Demencia senil leve
Cómo comentamos anteriormente, en la etapa inicial de la demencia aparecen olvidos claros. La persona nota que algo le pasa.
Podemos agrupar los síntomas así:
- Olvidar nombres de personas recién conocidas
- No encontrar dónde están objetos cotidianos como las llaves, móvil, cartera, bolso.
- Dificultad en encontrar palabras adecuadas en una conversación.
- Olvidos de citas y reuniones.
- Dificultas en los pagos y las vuelta del cambio
Demencia senil moderada
En esta etapa es cuando es más que evidente que a la persona anciana le pasa alguna cosa y se consulta con el médico.
La familia observa los siguientes síntomas:
- Olvidar conversaciones recientes.
- No saber en qué fecha estamos.
- Hablar con alguien por la mañana y a la tarde no acordarse.
- Muestras de cambio de carácter, mostrándose desanimado y frustrado.
- En grupo, se aísla y no participa.
- El anciano presenta dificultades para actividades complejas que lleven planificación y cálculo, y precisa ayuda para actividades como la cocina o la limpieza de la casa.
- Aparecen desorientaciones durante la marcha y se aconseja que camine acompañado por la ciudad.
Demencia senil avanzada
Estamos en la última fase. En ella se observan los siguientes síntomas:
- El anciano no reconoce a familiares ni tampoco a si mismo.
- Precisa de ayuda en las actividades de la vida diaria: higiene, comida, vestir, etc.
- La comunicación de cualquier tipo se va perdiendo progresivamente.
- Presenta alteraciones de las praxias y de movimientos coordinados, perdiendo la facultad de andar.
- También hay afectación en la deglución, provocando situaciones que pueden derivar en disfagia.
Evaluación de las fases de la demencia
La terapia asistida con animales es un buen tratamiento contra la demencia
Las fases de la demencia se pueden medir en diferentes escalas. La más común es la Escala Global del Deterioro (GDS) o también conocida como la escala de Reisberg.
Actualmente, existen dos escalas más que nos dan información y complementan la escala de GDS, de tal manera que una misma personas puede estar en diferentes fases según la escala.
Como decíamos, son dos:
- Escala FAST: Clasificación para la Evaluación de Función, dónde se evalúa más concretamente la funcionalidad preservada por parte del anciano que no su capacidad cognitiva.
- Escala CDR: Clasificación de la Demencia Clínica, muy utilizada en las investigaciones científicas sobre el deterioro cognitivo, dónde se evalúan 6 áreas: memoria, la orientación, el juicio y habilidad de resolver problemas, los eventos del entorno, el hogar conjuntamente con pasatiempos/las aficiones, y el cuidado personal
¿Cómo se trata de la demencia senil?
Actualmente, aunque el avance del conocimiento de la enfermedad es muy avanzado, no existe tratamiento que cure la demencia.
En cambio, si existen diversas herramientas, farmacológicas y no farmacológicas, que ayuda a retrasar el avance de la enfermedad
Tratamiento farmacológico
Dentro de la medicación, nos encontramos con grandes grupos de fármacos que ayuda a tratar los trastornos de carácter y cognitivo que provoca la enfermedad.
A destacar que son 4 los fármacos aprobados para combatir la demencia, y son: donepezilo, galantamina, rivastigmina y memantina.
Tratamientos no farmacológicos
Diversos son estos tratamientos y abarcan las tres dimensiones de las personas: social, cognitivo y funcional.
Abarca des de la estimulación cognitiva, sea a través de la terapia de reminiscencia o terapia de muñecas, hasta la terapia con animales, fisioterapia, terapia ocupacional, musicoterapia, etc.
La prevención, nuestro mejor aliado
Hay que tener muy presente que nuestra forma de vida, nuestros hábitos pueden favorecer o retrasar la posible aparición de la demencia.
Por tanto, la prevención es nuestra mejor arma. Y para ello tenemos que centrarnos en los tres grandes pilares de la buena salud: actividad física, un buen descanso y una dieta equilibrada.
Como expertos en el trato a la demencia senil , les recomendamos encarecidamente que tengan un vida activa, saludable, socialmente activa para tener un buen envejecimiento, activo y saludable.
Hola mi nombre es Marianela y quiero agradecer toda la informarmacion que dan sobre la Demencia senil , esto me ayudará a poder ayudar a mi esposo que esta empesando una Demencia senil leve . Gracias
Hola mi nombre es Marianela y quiero agradecer toda la informarmacion que dan sobre la Demencia senil , esto me ayudará a poder ayudar a mi esposo que esta empesando una Demencia senil leve . Gracias
Muy buenas y claras definiciones de la evolución demencial.
Muy claro y concreto. Gracias!
Buenas noches, mi abuela tiene demencia desde hace muchos años, ahora no quiere levantarse, no quiere comer y no sabemos en que face de la enfermedad esta ella, los médicos solo nos dicen que la tenemos que tener aquí en la casa pero no nos quiere comer y no sabemos que hacer, muchas gracias